Presidente de Agalep explicó que el gobierno podría fortalecer la economía rural, al incentivar el consumo de leche en los programas sociales.
Las raciones de leche repartidas a través del programa social Qali Warma podrían reducirse significativamente a solo 22 días este año, pese a que el 2019 la distribución fue de 144 días.
El lácteo es importante en la nutrición de los escolares; aunque reducir su consumo no solo afectará a los menores, también a la economía de los productores, quienes en gran mayoría están golpeados por la pobreza.
Carlos Lozada, presidente de Agalep explicó que el 10 % de la producción industrial de leche va para los programas del Estado; por ello, el Estado debería contribuir a “fortalecer las economías rurales”, refirió.
En el Perú hay cerca de medio millón de ganaderos lecheros, de ellos gran parte se encuentra en la pobreza y sostienen su economía familiar en la venta del lácteo.
Según explicó estos ganaderos de zonas rurales abastecen un promedio de 10 00 plantas pequeñas para elaborar quesos artesanales, pero “sobra”; por ello, se podría aprovechar el lácteo.